Ahora no sólo va a tener que sobrevivir para Clara, tambien tiene una responsabilidad ante la Reina Zabo (a la cual el es el único que la llama así en su cara); tambien esta Julie, la eterna y deliciosa periodista que no ha aceptado aún la profundidad de su relación con Benjamin. Todo ello envuelto en una historia de asesinatos, misterio y personajes de doble moral.
Nuevos retos y nuevos giros de trama. Una vez más la historia deja de tener a Benjamin como centro, pero lo tiene como uno de los puntos focales alrededor de los cuales todos se mueven.
Por más que desee Benjamín, no puede dejar de ser lo que es, un sujeto que logra expiar culpas ajenas, lo quiera o no.
Nuevos amigos, nuevos enemigos y seguir descubriendo las complejidades del clan Malaussène, donde hasta un perro epiléptico es importante en la historia de esta peculiar familia.
No el mejor de la serie, pero aún así muy por encima del promedio.
